Manuel y Rosita en la huida del bombardeo en el libro "El soldado alto" nos habla de que siguiendo el camino que va a los lavadores públicos del pueblo, se refugiaron en una casita junto al depósito de agua de Corbera.
Estos lavaderos se sitúan a orillas del río Sec donde conserva la Font Vella de Corbera d'Ebre, con la fuente, unos antiguos lavaderos públicos donde algunas partes datan del siglo XVII y el abrevadero. Algunas partes del conjunto son originales pero la parte de los lavaderos se ha modificado.
La estructura de la construcción sigue el patrón de los lavaderos más bonitos existentes en la Terra Alta, pero, en este caso, el conjunto se encuentra enmarcado con un muro en forma de U. Los sillares son regulares y bien cortados. El muro originariamente tenía alturas diferentes, aspecto que todavía se conserva en alguna parte, pero posteriormente se elevó al lado de los lavaderos.
Todo el muro está rematado con una moldura, más elevado en la parte de la fuente en origen. En el conjunto se observan dos elementos distintivos respecto al grupo: los lavaderos se encuentran protegidos por un tejado y la presencia de unas toscas hornacinas en la pared del fondo tocando los lavaderos. Seguramente eran los estantes para guardar el jabón mojado o algún otro objeto utilizado para hacer la colada.
Cuentan que el lavadero grande era donde lavaban la ropa, de casa llevaban un cubo con la ropa, jabón y lejía. Y el lavadero pequeño era donde aclaraban la ropa. También nos cuentan que cogían agua para llevarla a casa.